En 2019, Triumph Motorcycles sorprendió con el estreno de la Rocket 3, la motocicleta de producción en serie con la mayor cilindrada del mundo. Hoy, el modelo ha conseguido el mejor registro de aceleración en los 118 años de historia de la firma británica.
Hablamos de pasar de 0 a 60 millas por hora (97 km/h) en 2,73 segundos. Previo a esta nueva marca, el récord antes le pertenecía la Thruxton R, que en 2016 logró hacerlo en 3,1 segundos; y una década antes, la Speed Triple había anotado 3,25 segundos en la misma prueba.
El motor tricilíndrico de 2.500 cc ubica también a este modelo como el de mayor torque entre todas las motocicletas de producción del mercado, con 221 Nm a las 4.000 rpm.
Dichas características le permitieron también dejar en el pasado el mejor crono de la Rocket 3 de la generación anterior, establecido en 3,3 segundos en 2010.
“Triumph ha demostrado una vez más una capacidad realmente sobresaliente. Con la nueva marca alcanzada por la versión R de la Rocket 3, volvemos a entrar en un territorio desconocido, porque nunca una Triumph había alcanzado una aceleración tan increíble”, celebró Paul Stroud, el director comercial del fabricante con sede en Hinckley.
El proceso para el récord de la Rocket 3
Para cumplir con su objetivo, el equipo de Triumph Motorcycles se desplazó hasta la costa del mar Mediterráneo, específicamente al Circuito de Velocidad de Cartagena.
Con 3,5 kilómetros de longitud y una recta principal de 610 metros, es uno de los trazados más populares de España, gracias a su ubicación estratégica y el clima templado de la Región de Murcia.
En la previa, los ingenieros de la marca prepararon una versión de preproducción de la nueva Rocket 3 con el ahorro de peso en mente. Sin embargo, la Rocket 3 R que logró la marca estaba con una configuración cercana a la de serie, dado que apenas se quitaron los espejos y el soporte de la placa patente, según los requerimientos de las autoridades de la pista.
Además, la aventura contó con el soporte del fabricante británico de neumáticos Avon, y desde Triumph valoraron la experiencia de este aliado estratégico, ya que permitió un agarre y estabilidad óptimos.
“Nuestro objetivo era demostrar el excepcional rendimiento de su nuevo motor. Ahora que lo hemos logrado, el equipo está realmente orgulloso. Con la nueva gama Rocket 3, hemos demostrado que podemos construir motocicletas de producción de las más altas prestaciones, capaces de ofrecer un rendimiento y una capacidad increíbles”, complementó Stroud.
