Si en el segmento de los vehículos se ven pocas mujeres, en el de los camiones pareciera qué hay aún menos. Pero las hay. Una de ellas es la argentina Jimena Albarracín, Project Leader de Top Team de Scania, concurso realizado por el fabricante sueco que busca al mejor equipo de mecánicos de la marca en cada país. Los ganadores participan en una competencia regional y el mejor puntaje pasa a la final mundial . Jimena, es la encargada de coordinar la competencia a nivel regional, donde participaron técnicos de Perú, Colombia, México y Argentina.
Ya son cerca de siete años los que Jimena lleva trabajando en Scania, primero como instructora técnica y ahora como responsable del área de capacitación de conductores. Fue en una pausa durante la competencia de Top Team que pudimos conversar con ella sobre cómo ha sido su camino en la empresa.
En cuanto a la competencia, a pesar de los nervios de los participantes, vio mucha energía de parte de los mecánicos chilenos y ,al momento de hacer esta entrevista,también eran los que habían sacado el mejor resultado a nivel regional.
Dentro de las pruebas que prepara Jimena y el equipo a cargo de la competencia crean pruebas con distintos tipos de vehículos como camiones, buses o motores para que haya variedad y los desafíos sean parejos para todos. “Tratamos de que sea uniforme porque después la regional la hacen los suecos, entonces para que estén todos preparados y al mismo nivel”.
Tirarse a la pileta
¿Cómo se llega a trabajar a un área más técnica? Para Jimena ha sido un camino natural dentro de todo, porque “siempre me fui por el otro lado de lo que se espera típicamente que haga una mujer”.
Los inicios de Jimena en Scania partieron en el área de logística y fue una búsqueda interna para instructores técnicos que la llevó a tirarse a la pileta, como dice ella.
“Salió todo bien, pero si mucha presión por ser la primera instructora técnica mujer a nivel regional. Por suerte me trataron súper bien y nunca sentí diferencias”.
Junto al estudio, Jimena también recuerda a sus compañeros que le enseñaron mucho y la apoyaron en todo el proceso.
A pesar de que no hubo ni una mujer participando activamente en la competencia como mecánica, sí hubo presencia femenina como coach o como coordinadoras haciendo su aporte al equipo.
En su visión, es cosa de tiempo para ver a más chicas en estos terrenos. “Hoy en día se puede ver cada vez un poco más. Yo me acuerdo que al principio cuando empecé a estudiar ingeniería, al principio había muy pocas mujeres y en los últimos años ya te dabas cuenta que cada vez había más mujeres en las clases”.
Esto también lo ha visto actualmente en la planta de producción de Brasil. “Hay un montón de mujeres que son las que arman el camión. Cada vez se ven más. Y por lo menos en los talleres de Argentina se ven mujeres, no tanto como quisiéramos, pero vamos en camino”.
Un aspecto clave para esto, comenta Jimena, “es que te tiene que gustar”. “A mi siempre me gustó trabajar con hombres, como que siempre me sentí un poco más cómoda, y si tienes el bichito de querer estudiarlo, qué importa que te digan que no es por ahí o que se te va a hacer más difícil. Si una quiere, puede”.