El libro de Record Guinness ha reconocido a Jessi Combs como la mujer más rápida del mundo, quien hace casi un año viajó a 841,338 km/h en una hazaña que le costó la vida
La fallecida piloto y presentadora estadounidense de 39 años quería convertirse en la mujer más rápida del planeta, para lo cual en agosto del año pasado puso en marcha su plan.
Así, decidida a cumplir su sueño a bordo de su auto de 52.000 CV propulsado por motores a reacción, Jessi entrenaba en un lago seco en el desierto de Alvord, en Oregón, cuando un objeto impactó en el tren delantero del vehículo, lo que colapsó las ruedas y derivó en el accidente que acabó con su vida.


La mayor velocidad que registró en ese momento fue de increíbles 885 km/h, sin embargo los organizadores del libro de Récord Guinness tuvieron en cuenta una medición previa al momento en el que se produjo el fatal choque.
“Realmente no sé cómo sentirme al respecto, ya que ningún registro podría valer la pena de que ella no estuviera aquí, pero era un objetivo que realmente quería, y es muy difícil para mí incluso mirar el auto sin llorar. Estoy muy orgulloso de ella”, expresó emocionado Terry Madden, pareja de Jessi.
Combs, quien se hizo reconocida también por sus apariciones en programas como Overhaulin y All Girls Garage, había llegado a los 777 km/h años antes, y con su marca de 841,338 km/h supera el récord que poseía Kitty O’Neil desde 1976, cuando alcanzó los 821,908 km/h en la misma zona.